Qwirkle es un juego en el que los jugadores deben formar filas o columnas utilizando fichas con diferentes colores y formas. Cada jugador, en su turno, intenta colocar fichas que compartan un mismo color o una misma forma en una fila o columna, tratando de crear combinaciones que les otorguen la mayor cantidad de puntos posible. A medida que el tablero se llena, se incrementa la dificultad de encontrar combinaciones válidas. El juego se desarrolla en varias rondas, y el objetivo es acumular el mayor número de puntos al final de la partida. Las fichas tienen seis formas y seis colores diferentes, lo que añade complejidad y estrategia a la hora de decidir dónde colocarlas.